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martes, 27 de febrero de 2018

DE DOMEÑO VIEJO A LORIGUILLA VIEJO (24/2/2018).


Esta semana os muestro una ruta muy sencilla, amable, pero muy vistosa e ideal para el que quiera iniciarse en el senderismo. La visita al excelente blog de Francesc "Caminar després dels 50" y el track del usuario de Wikiloc "José Ángel Cortijo", me sugirieron realizar esta ruta para visitar esta zona del embalse de Loriguilla que no conocía. Así pues, nos desplazamos hasta la antigua localización de Domeño para disfrutar de este entretenido itinerario que bordea el pantano de Loriguilla y lo cruza por el denominado puente "del sifón del Turia".


Para llegar hasta el inicio de esta ruta accederemos por la CV-35 y pocos metros antes del Kilómetro 62 tomaremos el desvío a la izquierda hacia Domeño viejo. Allí, junto al puente que cruza el Tuéjar casi en el punto en el que desemboca en el Turia en un azud, encontramos una explanada donde podemos dejar el vehículo.


En esta explanada dejamos los coches.


Lo primero que llama nuestra atención es el cerro en el que se encarama el castillo de Domeño, iluminado por ese deseado sol que no alcanza aún la explanada en la que hemos aparcado los coches.


 El frío es algo intenso. De hecho, el plástico que cubre este panel tiene una capa de hielo encima.


 El pequeño azud y el puente que os describía pocas líneas más arriba.


 Hierático y ajeno totalmente por ello a nuestra presencia, este cormorán nos permite fotografiarlo sin ningún problema.


De nuevo el castillo de Domeño, ahora más cerca de nosotros gracias al zoom de nuestra cámara, reclama el protagonismo que se merece, encaramado en lo alto del cerro, impasible al paso del tiempo.


 Algo más lejos, en el horizonte, también reclama su parte de protagonismo la orgullosa cima del pico del Remedio. Su imponente estampa no es para menos.


Las aguas del río Tuéjar o de Chelva, mueren aquí en el Turia que lo acoge con los brazos abiertos.


Y antes de la partida, el grupo animoso posa, cual equipo de fútbol, ante las cámaras (tres a la vez) antes de comenzar esta bonita ruta.
De pie, de izq. a der. Ana, Mari, Vicente, Carmen, Mariam, Rafa, Amparo y Eduardo.
Agachados: Ricardo, servidor y Emilio Romero.


Empezamos nuestra ruta cruzando el puente por lo que fue una vieja carretera, ya usada muy poco.


Abandonamos la vieja carretera a nuestra izquierda por un ancho camino.


Un buen sol mitiga casi totalmente el frío de la mañana y caminar por aquí es muy reconfortante.


Nuevamente un desvío a la izquierda...


... que nos lleva a cruzar un puente sobre el Turia a pesar del aviso de su mal estado.


El Turia corre por aquí a engrosar el nivel del embalse de Loriguilla.


También sabemos que caminamos por un terreno inundable, aunque las condiciones actuales nos hace deducir que tal posibilidad es remota en estos momentos.


El ancho camino nos permite una amena y tranquila conversación. Transcurre paralelo al río Turia...


...lo que nos permite disfrutar de bonitos tramos como el de la imagen.


El grupo camina tranquilo, disfrutando de un buen tiempo que nos hace recrearnos más en el paisaje que nos rodea.


El Turia también baja sosegado. Tal vez el invierno le afecte como a la naturaleza y durante esta estación "inverne" o ralentice su actividad.


El recorrido hasta ahora ha sido bastante plano. Esta pequeña subida rompe esta uniformidad.


Una pequeña parada para echar un vistazo atrás.
Siempre nos gusta volver la mirada atrás para ver lo recorrido, aunque sin nostalgia. Lo bueno siempre está por venir (o, al menos, eso es lo que esperamos y creemos).


Pasamos junto a estos tubos que conducen el agua hacia el sifón.
Nos parecen un feo elemento en la naturaleza, pero entendemos que tiene un porqué.


Ya nos acercamos al puente del sifón. Empezamos a tener bonitas panorámicas sobre este brazo del embalse de Loriguilla.


Y enseguida tenemos ante nosotros el espectacular puente que nos cruzará a la otra parte.


Ahora cruzaremos al otro lado por encima de este puente donde se apoyan las enormes tuberías para salvar el embalse.


Aquí veis la escalera que nos baja hasta el nivel del puente para poder cruzarlo.


Uno a uno iremos bajando por ella.


Vistas desde el puente del embalse.


Al final del puente, habremos de agacharnos y pasar debajo de la tubería de la izquierda para encontrar las escaleras que salvan el desnivel existente con la carretera al antiguo Loriguilla.


Apenas subidos unos escalones, las vistas nos reconfortan y nos hacen olvidar la fealdad de los grandes tubos.


Estas escaleras salvan el desnivel desde el puente a la carretera. Es, tal vez, el punto más "pesado" de todo el recorrido.


Una vez en la carretera, tenemos esta perspectiva del puente que acabamos de cruzar.


Una vez en la carretera, podríamos volver al inicio de la ruta volviendo por la izquierda. Nosotros nos acercaremos al emplazamiento del antiguo Loriguilla siguiendo la carretera por la derecha. Luego regresaremos por aquí para acabar la ruta. Aquí vemos como la tubería salta por encima de la carretera para subir más arriba.


Antes de continuar nos relajamos con esta bonita vista.


Otra toma del puente.


Seguimos ahora la carretera asfaltada hasta el final.


Durante este tramo vamos a tener estas preciosas vistas como compañera de viaje.


El camino es placentero por muchos motivos: el paisaje, la compañía, el buen tiempo...


Un cartel nos avisa que nos vamos a encontrar con una puerta cerrada. Esto nos pone en alerta ante la posibilidad de no poder llegar hasta el final.


Pedro nuestros temores se desvanecen ante esta información en la puerta cerrada que nos informa de que podemos pasar porque la puerta está entornada, no cerrada. Lo único que tenemos que hacer es cerrarla a nuestro paso.


Pues estamos llegando ya a nuestros destino.


Estos paneles nos dan información del entorno en el que nos encontramos.


Este panel informa que nos encontramos en el enclave de"Loriguilla natural", que dispone de unas casas para alojamiento turístico rural.


Del antiguo Loriguilla sólo quedan en pie la antigua escuela...


...y la iglesia de San Juan Bautista.


Frente a la iglesia, en una amplia plaza, como no podía ser de otra manera, una fuente ocupa el lugar central. Junto a la plaza, se encuentra el conjunto de casitas que conforman el complejo turístico de alojamiento rural.


Frente a la fachada de la iglesia, un corto paseo nos acerca a un bonito mirador sobre las aguas del embalse.


Las vistas son inmejorables.


Una lancha rompe la uniformidad del agua.


Y quiero formar parte modestamente de este grandioso paisaje posando para una foto, pero el resultado no es el mejor posible.


Unos bancos al sol son el mejor lugar para disfrutar de un estupendo almuerzo en el que no faltó de nada, como es habitual.


Desde aquí vemos el embarcadero.


Panorámica desde este bonito mirador.


El silencio, la paz, el paisaje, la belleza, la primaveral luz...momento inefable de felicidad.
Con qué poco (o mucho, según se mire) somos capaces de disfrutar y ser felices. No nos hace falta mucho más.


Complejo turístico rural de Loriguilla viejo.


Antes de dejar este silencioso y tranquilo lugar, nos asomamos al interior de la iglesia con nuestra cámara a través del ventanuco de la puerta. La desolación y el abandono es lo que captamos con pena y tristeza.


Volvemos sobre nuestros pasos.


Saliendo del  pueblo, contemplamos la tierra que en otro tiempo estuvo atendida y labrada y ahora vive en silencio el abandono al que se vio obligada por la construcción del embalse.


De vuelta, seguiremos disfrutando del azul esmeralda que pinta las tranquilas aguas del embalse.


Las aguas del embalse dan mucho colorido a la ruta, lo que le otorga una espectacularidad especial que la hace muy recomendable a pesar de su sencillez y la ausencia de sendas.


Llegamos de nuevo hasta el punto en el que el tubo del sifón sube por la ladera de la montaña hacia el pico del Cerro.


Nueva vista del puente del sifón. Estas tuberías al parecer vienen del embalse de Benagéber.
Nos viene a la mente la idea de que siglos atrás los romanos ya construyeron una espectacular obra de ingeniería para aprovechar las aguas del río Tuéjar, el conocido como acueducto de Peña Cortada. El paralelismo es claro.


El agua del embalse es el leitmotiv de esta ruta.


Aprovechamos el potente zoom de nuestra cámara para resaltar la cima del Remedio.


Disfrutamos mucho de las vistas sobre el embalse.


Otra perspectiva del puente.


En este punto me pareció descubrir un evidente perfil de persona en la roca. ¿Lo veis?


Un fácil caminar nos va llevando hacia el final.


La carretera, poco transitada, transcurre paralela a un barranco que sorprendentemente lleva agua.


En este punto, la carretera desemboca en la CV-35, pero escasos metros antes nos desviamos a la izquierda para seguir por la vieja carretera ya en desuso.


Este última tramo no dispone ya de vistas sobre el embalse.


Puente de la CV-35 que salva el barranco del Agua.


El abandono de esta carretera es evidente. Esta señal nos retrotrae a los años sesenta o más.


La primavera, es evidente, ya ha venido.


Y no muy lejos de donde estamos, divisamos la población de Chelva.


Giro a la izquierda. Seguir por la derecha nos sacaría a la CV-35.


Apenas una curva y estaremos de nuevo donde comenzamos la ruta.


El castillo de Domeño y el Remedio enmarcan esta foto.


Nuevamente, el punto de inicio.


Se cierra el círculo con otra toma del castillo. 
Todo lo que empieza, termina. Aunque no siempre en el mismo sitio (en este caso sí).

Después de acabar, como es habitual en muchas de nuestras rutas, nos desplazamos hasta Calles para disfrutar de una buena comida. En este caso, en el restaurante Galiano's, donde comimos muy bien a precio razonable.


Antes de la comida, un paseo por Calles.


Ayuntamiento de la localidad.


Calle típica: silenciosa, pulcra, detenida en el tiempo.


Y el paseo junto al río no podía faltar.


Mural cerámico con el acueducto de Peña Cortada.



                                                                    
Estos son los platos que conformaron el menú. 
Como podéis comprobar, excelente presentación. 



La ruta en el mapa.



La ruta en Wikiloc.

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Película


14 comentarios:

  1. ¡Hola Emilio!

    Muy interesante esta ruta, lástima del "sifón", pero las comodidades de la vida actual requieren de estos mamotretos, que se la va a hacer...
    Me ha traído buenos recuerdos ese castillo del Pico del Remedio, ese "café con leche" que me diste para entrar en calor... jejeje

    Un abrazo.

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    1. ¡Hola, David! La ruta es muy sencilla y tranquila, aunque las vistas del embalse la hacen merecedora de ser recorrida. Obviaremos también esos tubos que tanto afean el paisaje, pero qué le vamos a hacer. Buen recuerdo tengo también de ese día en el que subimos al Remedio. Gran día senderista. A ver si repetimos.
      Un abrazo.

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  2. Hola Emilio...
    Una sencilla,pero a la vez que interesante ruta,de Domeño a Loriguilla.Esa zona de Domeño,me ha traído recuerdos de cuando se podía incluso acampar por la zona.
    Desde luego que cualquier ruta en la que nos encontremos con agua,la realza totalmente.Buen caudal se veía en esas partes del embalse que nos muestras.
    Como siempre,buen final gastronómico para una buena jornada y amena jornada senderista.

    Un abrazo.

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    1. ¡Hola, Juane! Muy sencilla ruta, pero con el aliciente del azul del embalse que nos hace olvidar la comodidad de la pista y la carretera vieja. El embalse mostraba un buen aspecto, a pesar de la sequía. Esperemos que mejore. El final gastronómico, otro aliciente más de la ruta.
      Un abrazo.

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  3. Ruta no muy exigente en esfuerzo pero hermosa en su paisaje a pesar de la irrupción de elementos que demanda nuestra civilización para hacer la vida más cómoda. Pueblos que conocí ya deshabitados e incluso parcialmente cubiertos por las aguas, especialmente Loriguilla. Vistas que sugieren inspiración poética que alimentan el alma. Un abrazo.

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    1. ¡Hola, Emilio! Ruta nada exigente y muy cómoda, pero con mucho encanto como tuvimos ocasión de disfrutar en un estupendo día senderista, con final gastronómico incluido que puso la guinda al pastel.
      Un abrazo.

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  4. Hola Emilio.

    Pese a la ausencia de sendas y esas infraestructuras hidráulicas, una ruta la mar de bonita. El agua siempre es un elemento diferenciador a la hora de medir la belleza de un paisaje, ya sea una fuente, un arroyo, un río, un lago...el mar, y hasta un embalse, que en este caso fue el que os regaló auténticas postales, además, caminar viendo estas calmadas, a mi, y por lo que leo, a la mayoría, les relaja e inspira.

    Un abrazo.

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    1. ¡Hola, Dani! Bellas imágenes del embalse que suplen con creces la ausencia de senderos y caminos de herradura que tanto nos gustan. Aunque sencilla, con alicientes suficientes para disfrutar de ella y llenar una tranquila mañana casi, casi, primaveral.
      Un abrazo.

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  5. Hola Emilio.

    Los embalses aunque necesarios, conllevan una buena dosis de sufrimiento para quien tiene que abandonar su casa y sus tierras.

    Recorrido sencillo, pero muy atractivo visualmente, con el embalse de Loriguilla, como centro neurálgico de la ruta. Me sonaba mucho esta zona, y leyendo el final veo que esta cerca de Chelva, con su famosa ruta del Agua.

    Un saludo.

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    1. ¡Hola, Eduardo! Efectivamente, nos ponemos en la piel de los moradores que tuvieron que abandonar toda una vida y dejarla atrás en pos de la modernidad y se nos encoge el corazón. En cuanto a la ruta, sencilla pero muy vistosa y entretenida. Recomendable para los que quieren iniciarse en el senderismo. La zona está muy cerquita de Chelva, efectivamente.
      Saludos.

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  6. Hola Emilio
    Una ruta fácil y quizás diferente que también es bueno conocer con estupendas vistas a esos embalses que transmiten tranquilidad.

    Que bien sientan esos almuerzos en la montaña en los que como bien dices seguro que no falto de nada.

    Un abrazo
    Jose
    TROTASENDES BENICALAP

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    1. ¡Hola, Jose! El azul del agua acompaña en gran parte de la ruta y la dota de espectacularidad, a pesar de la facilidad del recorrido. Recomendable para pasar una buena mañana sin sobresaltos. Los almuerzos, constituyen uno de los momentos más esperados del día, por supuesto.
      Un abrazo.

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  7. Hola Emilio!!
    Veo que realizasteis la ruta en sentido inverso a como la hicimos nosotros, de una manera o de otra, y a pesar de transcurrir practicamente toda ella por asfalto, las vistas al pantano, hacen que te olvides de ello y te centres en disfrutar de la visión del agua. Por lo que veo, no os acercasteis hasta los pies de la mundialmente conocida Cascada de Domeño, jejejeje.
    Me alegro que lo disfrutarais.

    Saludos
    Francesc

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    1. ¡Hola, Francesc! Ruta sencilla y vistosa a la vez. El pantano le da un color especial a una ruta tan sencilla, convirtiéndola en una ruta muy agradable y visual. La Cascada la dejamos para otra ocasión, que seguro que repetimos.
      Un saludo.

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